Ligamentos y tendones

Copiado de un post de Sergio Consuegra en Facebook que me ha parecido interesante, enlace al artículo original incluido.

Aunque ambos son completamente diferentes, es muy habitual confundir tendones con ligamentos y no tener clara cuáles son las funciones y características de cada uno.

Entender cómo son y como funciona cada uno te ayudará a respetarlos y a prevenir su lesión.

Los tendones tienen como función la transmisión de fuerzas desde el músculo al hueso, y viceversa. Está compuesto en un 90% por fibras colágenas, que son flexibles (no elásticas, ojo) y a su vez proporcionan una gran resistencia a la tracción. Asemeja el tendón a una cuerda estática o semiestática. Imagina que se te ha quedado el coche atascado en el barro y no sale. Coges tu cuerda de escalada (dinámica) y te pones a tirar. Vaya. Al ser dinámica (elástica) absorbe toda la energía de tus tirones y no le transmite la fuerza al coche, por lo que no lo puedes sacar. En cambio, si utilizas una estática (es flexible, la guardas doblada y no se rompe), al no dinamizar, transmite toda tu fuerza al coche, con lo que sí consigues sacarlo. El tendón funciona exactamente igual. Por otro lado, el resto de su composición es un 0,5% fibras elásticas, un 0,5% mucopolisacáridos y un 9% agua.

En el lado opuesto se encuentran los ligamentos. Su función es reforzar las articulaciones, limitando la amplitud del movimiento para impedir que se produzca una luxación. Aunque no son especialmente elásticos, tienen una mayor capacidad de deformación que el tendón.

Schöffl, V et al. (2024) comprobaron que la lesión más frecuente (un 52%) en los escaladores se daba en los dedos, predominando las lesiones en poleas (ligamentos) y en tendones.

Es decir, las principales lesiones que se dan en los escaladores se producen porque nuestras estructuras no son capaces de soportar y asumir la carga a las que las sometemos.

Y tú, ¿respetas a tu cuerpo cuando entrenas? ¿O sólo te interesa el encadene?

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